23/07/2011
Aunque la relación verano y lectura me parece infructuosa, y también un poco pedante decir a los demás lo que uno lee, me permito recomendarles algunas lecturas. Lo hago sólo porque son escritores de aquí, y considero que quizá sea bueno romper la habitual desidia que existe hacia nuestros mejores intelectuales. Que inventen ellos, decía Unamuno como expresión de esa parte ágrafa, o gozosa de su ignorancia, que tanto predetermina nuestros usos y costumbres. En este sentido anuncio a los habituales despistados que aquí hay buenos escritores, como son esta decena de los que les daré noticia.
Con ello no pretendo establecer ningún canon. Sólo quiero hablarles de libros que he leído con gusto, que es como hay que leer. Y digo con gusto porque para mí sólo hay dos tipos de libros: los que me mantienen con los ojos entregados y de los que deserto, porque la lectura tiene que ser un gozo, y no un suplicio.
El primero es de José López Martinez, excelente ensayista experto en los clásicos, escritor de fina erudición y luminosidad literaria. Con él uno lee, goza y aprende. Tres en uno. Se llama Memoria de nuestros clásicos y está editado por Vitrubio. Por él transitan nada menos que Cervantes, Gracián, Jovellanos, Cernuda…, estancias literarias de una ilustración nacional.
Desolación y vuelo, editado por Tusquets, recoge poemas escritos por José Corredor-Matheos entre 1951 y 2011. Aquí encontrarán una poesía desnuda que sale del alma para llegar a las otras almas. El sosiego y el corazón envuelven las palabras. Es una poesía que tiene una pureza que está más allá del pensamiento. Lean también El espíritu de La Mancha: pan, vino y aceite, excelente ensayo de Dionisio Cañas publicado por nuestra Diputación. El poeta realiza un buceo hacia nuestras raíces pleno de erudición y sagacidad.
El paisaje infinito, de José Rivero Serrano es un libro en el que la ficción, la documentación y la literatura se funden para crear una luz nueva, un intenso gozo literario. Rivero nunca defrauda a los amantes de la lectura, y su amplia erudición siempre es más lúcida que pedante. Almud lo edita.
El quinto es un hermoso libro de poemas lleno de nostalgia, sugerencia y corazón. Se llama Volver a Ciudad Real, está editado por la Biblioteca de Autores Manchegos y es de Francisco Mena Cantero, poeta de Ciudad Real que reside desde el año 1971 en Sevilla. La evocación inunda los poemas, la poesía sin artificios los envuelve y el corazón siempre termina ganando todas las batallas.
En fin, les recomiendo cinco libros hermosos escritos por gente de aquí. La próxima semana, en el siguiente artículo, les recomendaré cinco más, hasta llegar a esa decena que me he propuesto en el título.
Impreso desde www.manueljulia.com el día 01/04/2023 a las 14:04h.